MOVILIDAD EN ISLANDIA: MIÉRCOLES, 13 DE JULIO

Pepa y Toñi visitaron Mosfellabaer, cerca de Reikjavik, donde tuvieron oportunidad de visitar una "working school". Uno de los responsables del centro les explicó en que consiste este programa que lleva décadas realizándose en Islandia. Algunos centros educativos permanecen abiertos en verano y ofrecen la posibilidad de que los estudiantes de 13 a 18 años que lo soliciten puedan trabajar en ese centro durante algunas semanas de sus vacaciones de verano. Los estudiantes islandeses tienen tres meses de vacaciones y pueden trabajar en estos centros hasta un máximo de seis semanas. Principalmente hacen trabajos de limpieza, jardinería o pintura. Trabajan entre 3 a 7 horas, dependiendo de su edad, y reciben un sueldo que también varía en función de su edad y puede ser entre 6 y 10€ la hora. En el momento de la visita había algunos estudiantes pintando unas vallas y otros cortando el césped del campo de fútbol del centro. 

A continuación, Pepa y Toñi siguieron con un tour por el Círculo Dorado visitando varios lugares emblemáticos de la isla. La primera parada fue el Parque natural de Thingvellin, donde se encuentra la separación entre las dos placas tectónicas, la euroasiática y la americana y el lugar donde se celebraron los primeros parlamentos islandeses tras el asentamiento vikingo en el siglo X. En la segunda parada tuvieron oportunidad de ver un geiser en acción, expulsando agua y vapor y visitar el "geysir" del cual todos los geisers tomaron el nombre, pero que en la actualidad no está muy activo. Continuaron hacia la cascada de Gullfoss, una impresionante caída de agua a dos niveles y para finalizar el tour pasearon alrededor del cráter de un volcán que tiene un pequeño lago en su interior. 

Durante todo el día pudieron disfrutar del espectacular paisaje de la isla con sus campos de lava cubiertos de musgo, sus montañas e incluso vistas al glaciar Langjokull. 

Después del tour y ya en Reikjiavik llegó el momento de la degustación de productos típicos de los diferentes países y zonas de los participantes en el curso. Smart Teachers Play More pidió a los participantes en las semanas previas que llevaran productos típicos de cada zona y Pepa y Toñi llevaron paté de perdiz de La Carolina y aceite de oliva virgen extra. Fue una velada estupenda para conocer con más profundidad la gastronomía de diferentes partes de Europa y la participación fue excepcional. Sarah, Kristin y Cristina amenizaron la noche con juegos musicales que pusieron a todo el mundo a cantar y bailar.